La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), según una publicación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se define como una enfermedad pulmonar caracterizada por una reducción persistente al flujo de aire. Como también suele existir un daño multiorgánico, algunos autores plantean que realmente se trata de una enfermedad inflamatoria.
Las manifestaciones clínicas de las tres enfermedades se solapan. Las más frecuentes son las siguientes:
En la mayoría de los casos, todos estos síntomas se presentan a partir de los 40 años y la incidencia suele ser igual al comparar hombres y mujeres.
Causas de estos trastornos
También existe cierta similitud en cuanto a las causas de las tres condiciones. Según un trabajo de revisión científica publicado en la Revista Médica Sinergia, existen varias causas y factores de riesgo para el desarrollo de la EPOC.
Estos son los siguientes:
El diagnóstico es el aspecto que más varía entre las tres condiciones, ya que cada una se define por criterios específicos:
El tratamiento de las tres condiciones se basa en la combinación de fármacos, cambios en el estilo de vida y medidas de soporte, como el uso de oxígeno. Algunos de ellos similares a los que se emplean para el tratamiento del asma.
Las tres enfermedades, a menos que se deban a defectos congénitos como el déficit de alfa-1-antitripsina, son prevenibles. Basta con evitar la exposición a los factores de riesgo conocidos, los que representan la enorme mayoría de las causas. Por ejemplo, uno de los objetivos de las campañas en contra del tabaco es disminuir la incidencia de estas patologías.
Todas estas patologías son crónicas, y en muchos casos los síntomas tienden a empeorar con el tiempo. Por tal motivo, saber vivir con ciertas condiciones, como la dificultad respiratoria, puede ser todo un reto.
El cumplimiento de las medidas terapéuticas, la adopción de nuevos y más saludables hábitos de vida y acudir regularmente a una terapia psicológica son medidas que pueden ayudar a sobrellevar la enfermedad.
Si sospechas que tú o alguno de tus seres queridos padece de EPOC, enfisema o bronquitis crónica, lo más adecuado es acudir al doctor cuanto antes. Si bien en un principio basta con ir a un servicio de atención primaria para la orientación diagnóstica, los neumólogos son los médicos especialistas adecuados.