Dependientes de la luz en plena escalada de precios: «No me puedo permitir poner en marcha el ventilador»

Pacientes con enfermedades respiratorias que necesitan maquinaria conectada a la corriente doméstica piden ayudas para hacer frente al encarecimiento del servicio, que puede llegar a los 600 euros anuales por familia.

"Es muy sencillo. Si quiero tener 
oxígeno sin que me pase factura en casa, tengo que sacar alguna otra cosa. Este verano ha sido el ventilador, que solo lo hemos conectado en dos ocasiones, a todas luces. Y, en invierno, quizás haremos lo mismo con la calefacción". Quien expone esta situación es Salvador Mañosas, un vecino de Barcelona de 71 años que vive conectado a un respirador que le permite hacer frente a la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (MPOC) con la que convive desde hace cuatro años. A pesar de haber reducido otros gastos para mantener el consumo al mínimo, la factura de luz de su casa se ha duplicado en un año y casi se ha triplicado en dos años. De los 59 euros que pagaba en julio del año pasado se ha pasado a los 117 euros del mismo mes de este año. Una parte importante de este gasto viene de la máquina que tiene conectada "casi las 24 horas del día", dice Mañosas. Es un caso especialmente delicado, pero hay otros similares en todo el territorio. Lo denuncian asociaciones y afectados en NaciónDigital.

"Las familias nos dicen que se les ha disparado la factura y que no encuentran ningún descuento. No saben qué hacer", explica Yolanda Fernández, presidenta de la Asociación Catalana de Pacientes con Enfermedades Respiratoria Avanzada y Trasplante Pulmonar (Aire). En su caso, asegura que han enviado peticiones al ministerio de Sanidad y a la Generalitat, pero que no han encontrado ninguna respuesta que les alivie la situación.

En el ámbito estatal, donde se calcula que existen más de tres millones de personas con obstrucción pulmonar crónica, se encuentran un escenario similar. Por mucho que se haya presionado a los ministerios, no hay políticas abocadas a solucionar la realidad concreta de las familias con un coste médico especialmente alto en su factura eléctrica. El sobrecoste que calcula la Asociación de Pacientes con EPOC (APEPOC, por sus siglas en castellano) que afronta cada familia que se encuentra en esta situación puede alcanzar los 600 euros anuales .

Desde la sección catalana de la APEPOC reconocen que no todos los pacientes con obstrucción pulmonar afrontan un crecimiento de la factura tan grande, porque no todos tienen tan notoria dependencia eléctrica. "Para no caer en el alarmismo, hay que dejar claro que los principales damnificados son sólo los que necesitan un respirador durante todo el día . Y son estas personas las que necesitan algún tipo de subvención", reflexiona el portavoz de la sección catalana de APEPOC, Alfonso Viñuela.

La salud en juego


Entre este sector de los más afectados está Salvador Mañosas. Convive con tres máquinas. Una bomba de oxígeno conectada a la corriente, de donde sale un cable que le permite pasearse por su casa. Una segunda bomba, esa portátil y con unas baterías que se tienen que cargar, para que pueda salir de casa. Y una tercera máquina, esta para la apnea del sueño, que utiliza cada noche para dormir, conectada de manera simultánea a la primera bomba de oxígeno.

Accede al artículo completo en: Dependientes de la luz en plena escalada de precios: «No me puedo permitir poner en marcha el ventilador» | NacióDigital (naciodigital.cat)
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