Añadir sabor de mentol a los cigarrillos electrónicos podría dañar a los pulmones más que los cigarrillos electrónicos regulares, revela un nuevo estudio.

El sabor común a menta ayuda a administrar muchas más micropartículas tóxicas, en comparación con las cápsulas para los cigarrillos electrónicos que no contienen mentol. Los investigadores advierten que lo que provoca el daño en la función pulmonar son estas micropartículas.

"Tenga cuidado con los aditivos de los cigarrillos electrónicos", aconsejó el investigador sénior, Kambez Benam, profesor asociado de la división de medicina pulmonar, de las alergias y de la atención crítica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Pittsburgh.

"Si vapea, pueden hacer que inhale más partículas hasta los pulmones. No dé por sentado que como el mentol es una sustancia que se encuentra naturalmente en las plantas de menta, y se añade a algunos alimentos y bebidas, inhalarlo está bien", enfatizó.

"El sabor de mentol conduce a un número significativamente más alto de conteos de partículas que se inhalarían hasta los pulmones al vapearlas", comentó "Se sabe que los aerosoles de los cigarrillos electrónicos contienen muchas sustancias nocivas, por ejemplo nicotina y formaldehido".

Varios estudios han sugerido que el vapor de los cigarrillos electrónicos puede provocar inflamación en los pulmones, estrés oxidativo, daños en el ADN y una hiperrespuesta en las vías respiratorias que pueden desencadenar asma, apuntó Benam. Vapear estas sustancias puede provocar un daño pulmonar que altera a la función de los pulmones. Añadió que el mentol es una sustancia tóxica de este tipo.

Para observar el daño potencial del mentol, el equipo de Benam desarrolló un "robot vapeador" que imita la temperatura, las humedad, el volumen de calada y la duración del vapeo, para predecir el daño pulmonar por los cigarrillos electrónicos.

El sistema mide el tamaño y el número de las micropartículas en aerosol, y cómo actúan, dependiendo del contenido del líquido. Los efectos se evalúan en lo que se conoce como un "pulmón en un chip", un dispositivo que calcula la toxicidad potencial. ¿Qué encontró? El líquido de vapear mentolado emitía más micropartículas tóxicas.